Bereits am 31. August 2018 hatte DIE ZEIT auf die einsamen Aktionen von Carlo Maria Viganò aufmerksam gemacht: „Wenn ein hoher kirchlicher Würdenträger den Papst zum Rücktritt auffordert, muss schon einiges im Argen liegen im Vatikan. Wer ist der Mann, der Franziskus die Stirn bietet? Eine Spurensuche von Raoul Löbbert“: „Das gab es noch nie in der jüngeren Geschichte des Katholizismus: Da fordert ein Erzbischof den Papst per Brief öffentlich auf, zurückzutreten. So als wäre Pontifex ein politisches Amt wie jedes andere, seit Benedikt XVI. am 28. Februar 2013 den Stuhl Petri angeblich aus gesundheitlichen Gründen räumte, um als "Papa emeritus" (was immer das kirchenrechtlich ist) fortan durch die Vatikanischen Gärten zu flanieren. Schon formal ist die Traute von Erzbischof Carlo Maria Viganò also einmalig. Gegen alle Gehorsamskonventionen bietet er dem Papst vor aller Welt die Stirn. Hinzu kommt: Die Rücktrittsforderung des vatikanischen Diplomaten und ehemaligen Apostolischen Nuntius in den USA traf Franziskus im vielleicht verletzlichsten Moment seines Pontifikats: während einer diplomatisch heiklen Mission im einst sehr katholischen Irland. Immer wieder wurde die irische Gesellschaft in den vergangenen 20 Jahren erschüttert von Berichten über den jahrzehntelang geduldeten sexuellen Missbrauch an Kindern durch Kleriker. Und dann veröffentlichte eine Grand Jury des US-Bundesstaats Pennsylvania auch noch Tage bevor der päpstliche Flieger gen Dublin abhob einen Bericht über tausendfachen sexuellen Missbrauch in sechs Diözesen des Staates. Weltweites Entsetzen war die Folge. Dieses Entsetzen wollte auch nicht weichen, als Franziskus kurz nach Veröffentlichung des Grand-Jury-Berichts in einem Brief an alle Christen das Versagen seiner Kirche reumütig eingestand. Der Schrei der Opfer, schreibt Franziskus in dem Brief, sei stärker gewesen "als die Maßnahmen all derer, die versucht haben, ihn totzuschweigen". Was immer genau geschehen oder unterblieben ist: Viganò beschuldigt Franziskus nicht nur vor aller Welt, einen Missbrauchstäter vor Strafe bewahrt zu haben. Franziskus habe McCarrick angeblich auch noch zum Berater befördert, um dem Vatikan die Türen zu öffnen in die damalige Obama-Administration. Das alles ließe sich vielleicht noch abtun als giftiges Geraune eines bekennend konservativen Franziskus-Gegners, der mit der auslegungsfähigen Haltung des Papstes zum Sakrament der Ehe und der Kommunion für wiederverheiratete Geschiedene noch nie viel anfangen konnte. Carlo Maria Viganò behauptet: Bereits im Jahr 2013 habe er persönlich Papst Franziskus über angebliche homosexuelle Verfehlungen McCarricks informiert. Dieser sei schon damals kein unbeschriebenes Blatt gewesen in Rom: Bereits Papst Benedikt XVI. habe Jahre zuvor ein Reise- und Zelebrationsverbot über McCarrick verhängt. Einen offiziellen Beleg dafür gibt es nicht. Im Gegenteil: McCarrick las über Jahre hinweg ungestört die Messe und reiste 2012 sogar eigens in den Vatikan, um, wie die New York Times berichtete, dem deutschen Papst zum Geburtstag einen Erdbeer-Kiwi-Kuchen zu überreichen.“
”Papa contra Papam” – Papa contra
“Papa”
El viejo contra el nuevo,
Benedicto contra Francisco
Compilado por
Eberhard
Heller
Traducción del alemán por Hugo Enrique Córdoba
Aliaga.
“En una cita de su último libro publicada
previamente por el periódico francés “Le
Figaro,” Ratzinger escribe: “No puedo permanecer en silencio”, de donde , el periódico había publicado
extractos de antemano. En este punto de
su “Guerra de Papas”, él ya hace una crítica a una increíble política
eclesiástica. La cita en “Le Figaro”, es la siguiente: “La anulación del
celibato está absolutamente fuera de toda cuestión. El matrimonio demanda de
cada hombre una dedicación completa para con su familia, por otra parte, el servicio
al Señor, requiere la devoción total de
un hombre. No parece que sea posible seguir ambas vocaciones al mismo tiempo.“ (Ver
además PP del 13.1.2020)
Ya, ayer, Michael van Laack, sospechaba de la enorme presión y amenazas que Francisco había
hecho en contra de su dependiente Papa
emérito, de manera tal, que el arzobispo
Gänswein, no pudo hacer otra cosa como protector de Benedicto, que
obstruir ,y en su nombre ,remar hacia atrás, para preservar al Papa
emérito de la ira repentina a la que tiende Francisco (Ver además PP del 13.1.2020) tras las
publicaciones anteriores y las publicadas ayer en el libro: “Desde lo profundo del corazón del celibato
sacerdotal y la crisis de la Iglesia católica”
Ahora, un informe reciente confirma
estos supuestos. Según la Revista de noticias católica Kath.net : “El Papa
Francisco debió haberle solicitado a Benedicto
XVI, retirar el nombre del libro común “Desde lo profundo del corazón,
sacerdocio, celibato y la crisis de la Iglesia Católica”. A esta tesis la apoya
en el Vaticano el conocido periodista Antonio
Socci . Mucho estruendo hizo el periodista, cuando nombró una fuente de
confianza dentro del Vaticano; se dice que Francisco se enojó por la
publicación.
“El fin del mundo”. Bergoglio se enojó – así informó Socci en un Facebook –
que evidentemente , el “fin del mundo”
estalló en El Vaticano, cuando Bergoglio
se enojó; según Socci, el Papa convocó inmediatamente después al Arzobispo
Gänswein y le dio instrucciones para que quitara el nombre de Benedicto del libro y negara
completamente su paternidad literaria. A esto último podría haberlo hecho
Benedicto XVI. Por supuesto no lo hizo. Sin embargo, según el periodista, no pudo dar un falso testimonio y acusar
al Cardenal Sarah de que por él, todo esto no había obtenido ninguna
aprobación.
Aquí está la razón que da Ratzinger para descartar la coexistencia de
celibato sacerdotal y matrimonio
sacramental, “De la celebración de la
Eucaristía diaria y del servicio
integral que aquí se ofrece a Dios, se revela la imposibilidad de una unión matrimonial entre los mismos. Se
podría decir que la abstinencia funcional se habría convertido automáticamente
en ontológica. Esto cambió desde adentro su razón y significado. Hoy, sin
embargo, la objeción surgió de inmediato: que esta era una evaluación negativa
del cuerpo y de la sexualidad. La acusación de que el celibato sacerdotal se
basaba en una cosmovisión maniquea, fue sostenida en el siglo IV, pero de
inmediato fue rechazada terminantemente por los Padres , y luego, se silenció por un tiempo.
Tal diagnóstico es incorrecto, porque, en la iglesia, el matrimonio fue
considerado desde el principio como un regalo dado por Dios en el Paraíso. Pero, reclamaba al hombre como un todo; y el
servicio al Señor, también reclama el hombre por completo, de modo que ambas
vocaciones no parecían ser realizables al mismo tiempo. Así fue que la
capacidad de renunciar al matrimonio para estar allí solo para el Señor, se ha
convertido en un criterio para el servicio sacerdotal.” ( Die Tagespost del 15.1.2020 : El texto original en alemán que
aparece en el libro del Papa emérito Benedictro XVI “Sobre el sacerdocio y el
celibato desde lo profundo de nuestro
corazón”.
(Nosotros Tomamos la cita del texto que publicara la
pre impresión alemana exclusiva, con el amable permiso del editor de medios de Fe.
El libro de Robert Cardenal Sarah con
esta publicación de Benedcto XVI que aparece el 21.2.2020 bajo el título “Desde
lo profundo del corazón” en Fe-Mediemverlag (Editor de medios de fe,) Hauptstrasse
22, 88353 Kisslegg.)
Ya el 31 de agosto de 2018 “DIE ZEIT”
prestaba atención a las acciones solitarias de Carlo María Viganò: “Cuando un
alto dignatario ecleciástico le pide al
Papa que se retracte, debe haber algo bastante mal en el Vaticano. ¿Quien es el
hombre que desafía a Francisco?, una investigación por parte de Roul Löbbert
concluyó : Esto nunca ha sucedido en la reciente historia del catolicismo: allí,
un Arzobispo exige al Papa públicamente
por carta que se retracte. Como si el pontificado fuera una oficio político
como cualquier otro, desde que Benedicto XVI, el 28 de febrero de 2013, desocupó
la Silla de Pedro como Papa emérito presuntamente por razones de salud; como
Papa Emérito, (continúa siendo Papa legal según el derecho ecleciástico), y de
ahora en adelante, se pasea por los jardines del Vaticano. La lealtad del
Arzobispo Carlo María Viganó ya es única en términos formales contra todas las
convenciones de obediencia, desafía al Papa ante todo el mundo. Además de eso, se le sumó a Francisco la
renuncia de los diplomáticos del Vaticano y la del Nuncio Apostólico en los Estados
Unidos, quizás, en el momento más vulnerable de su pontificado cuando durante
una misión diplomáticamente delicada , en lo que fuera una vez la Irlanda muy católica, la sociedad irlandesa en
los últimos 20 años, fue, una y otra vez , conmocionada por informes sobre por
décadas tolerados abusos sexuales de niños por parte de clérigos. Y luego , un gran jurado del Estado
de Pensilvania, incluso días antes de que el avión papal despegara a Dublin, lanzó un informe sobre miles
de abusos sexuales en seis diócesis del Estado. .
El resultado fue el horror mundial. Este horror tampoco quiso ceder el paso, cuando
Francisco envió una carta, poco después de que se publicara el informe del Gran
Jurado; en esa carta a todos los cristianos, Francisco admitió con gran pesar el
fracaso de su Iglesia: “El grito de las víctimas, escribe Francisco en su carta, fue más fuerte “que las acciones
de todos los que lo han intentado mantener en silencio”. Lo que sucedió ,fue
que Viganò
no solo acusó a Francisco ante todo el mundo de haber salvado a un abusador
del castigo; Francisco supuestamente también promovió a McCarrick a consultor
para abrir las puertas del Vaticano a lo que entonces era la
Administración Obama. Quizás, todo esto
se pueda descartar como el murmullo profesionalmente venenoso de un conservador
opositor a Francisco, que nunca podría hacer
mucho en contra de la actitud interpretable
del sacerdocio hacia el sacramento del matrimonio y la comunión para todos los
divorciados vueltos a casar. Carlo María Viganò afirma: Ya en el año 2013 informó personalmente al Papa Francisco sobre la
presunta mala conducta homosexual de McCarricks. Incluso entonces, esto era una
foja en blanco en Roma: ya años antes, el Papa Benedicto XVI había impuesto una
prohibición de viajes y celebraciones a McCarrick . No hay evidencia oficial de
esto. Por el contrario: McCarrick celebró
Misa durante años sin ser molestado, e
incluso, como informó el New York Times, en 2012, McCarrick viajó al Vaticano para obsequiarle al Papa alemán un pastel de fresa y kiwi en su cumpleaños”.-
NOTA DEL TRADUCTOR: El presente texto apareció publicado en la revista:
EINSICHT RÖMISCH-CATHOLISCHE ZEITSCHRIFT credo ut
intelligam
REVISTA
CATOLICA ROMANA EINSICHT creo
para comprender
Año 50.
Numero 1 - febrero 2020 , páginas 12, 13.-
Traducción del alemán por Hugo Enrique Córdoba
Aliaga.-
Córdoba
Capital 10/VI/20.- República Argentina.-